El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, se negó a culpar a Arabia Saudita sobre la desaparición del periodista de Jamal Khashoggi, mientras nuevas revelaciones señalan que el reportero habría sido torturado y asesinado en el consulado de Estambul.
Tras reunirse con los dirigentes sauditas en Riad la víspera, Pompeo se entrevistó este miércoles en Ankara con el presidente turco Recep Tayyip Erdogan, quien ha evitado hasta ahora incriminar directamente a Arabia Saudita en el caso.
La visita a Ankara de Pompeo coincide con la publicación en la prensa progubernamental turca de nuevas acusaciones contra Riad, según las cuales agentes sauditas torturaron y asesinaron al periodista en el consulado de su país en Estambul el 2 de octubre.
Pese a los múltiples indicios que implican a agentes sauditas en el caso, Washington parece acordarle el beneficio de la duda a su aliado, insistiendo en la voluntad de Riad de llevar a cabo su propia investigación.
FUENTE AFP